alcayatas y tostadas

lunes, 10 agosto 2009. Voy en autobús, el autobús pasa junto a un estadio donde hay un concierto. Me tapo la cara. En realidad no es un autobús, voy sujeta a un muro que se mueve por tres alcayatas. Pienso que cuando llegue mi parada no sabré bajarme.
+
Me despiertan ruidos en el pasillo. Busco a tientas una camiseta, pero está acartonada y no puedo ponérmela. Cojo una rebeca larga y salgo. Alberto está en el pasillo untando tostadas con mantequilla. Me extraña que haya venido desde el trabajo para desayunar, pero no digo nada, me siento con él y nos comemos las tostadas. Cuando me fijo en la rebeca veo que no es la mía, color caqui, sino verde muy pálido.